“Sácalo de aquí, sácalo de aquí”, relata Verónica Aguilera que le dijo a su pareja Víctor Águila Nápoli luego del asesinato de su amigo, y que éste le respondió “no, voy a descuartizarlo”, ante lo cual ella le habría señalado “no, cómo se te ocurre”. Así contó a “Teletrece” la mujer sobre uno de los episodios policiales más espeluznantes de los últimos meses en el país. En una entrevista realizada por el periodista Emilio Sutherland, Aguilera confiesa que desde la puerta del baño de la vivienda en que habitaban en la población Los Canelos de la comuna de Cañete tuvo que grabar un video con su teléfono celular el momento en que Águila Nápoli, de 20 años, desmembraba el cuerpo de quien fuera su mejor amigo, Rubén Humberto Villagra Arias, de 24 años.
“Fui obligada”, explicó la mujer al relatar que el sujeto le insistía señalando: “grábame, grábame, sácame fotos”. Consultada sobre las razones por las cuales no denunció inmediatamente el crimen a la policía, señala que “estaba con mi hijo aquí en mi casa… ¡si mató a su amigo, cómo no podía haberle dado un tiro a mi hijo o a mí!”. “Él lo echó todo en unas bolsas y en mochilas” y luego partieron al campo a donde dejaron los restos ya mutilados muy cerca de nuevo hospital de Cañete, señala Aguilera, agregando que en todo momento Águila estaba con un arma.
Verónica Aguilera se encuentra en libertad y está colaborando en la investigación del crimen, aunque necesita urgente ayuda sicológica debido al estado de shock en que quedó tras los impactantes hechos que presenció. Sólo pudo reaccionar una vez que Águila Nápoli mató a una segunda persona el pasado sábado en la ciudad de Osorno. En esta ocasión se comunicó con la policía porque su pareja también quería descuartizar a su nueva víctima fatal. “Yo le dije donde estaba y todo porque ya estaba cansada de la vida que estaba llevando”, afirma entre sollozos.
El segundo asesinado fue identificado como Hernán Nicolás Yáñez Cárdenas, de 46 años.
LBD
