Todo partió hoy por la mañana. Producto de las lluvias, me propuse hacer unas comidas ricas y fui a comprar huevos. Cinco huevos. Pague con $500, como siempre . . porque estaban a $90. Alcanzaba
Y el casero de siempre me dice . . . "le falta señorita"
. . subieron ??
"Si. .. .ahora están a $140"
x 8575755893
Compre 4 huevos nomas. Y en el camino venía meditando lo tradicional . .que todo va al alza, para la desgracia de los clase media . . . y las falacias entorno a ella.
Estamos en cercanías de elecciones. Ergo, el grueso del país, que es clase media, se convierte en la niña del baile, pues es fuente del preciado voto. Peldaño mágico que lleva a los más oscuros seres a ocupar cargos de relevancia nacional. El discurso, es el mismo de siempre. Y es verbalmente homologador (¡todos somos clase media! , La Argandoña es del pueblo ! )
Se apela a nuestro olvido y abandono, al "inestimable" aporte de los trabajadores, dueñas de casa, estudiantes, etc que son "el corazon de la patria" y bla bla. Se emplea un lenguaje del mismo tipo que se le hace a un actor, deportista, etc, que ha llegado al fin de su vida , y merece un reconocimiento a su trayectoria XD Palabrerío barato que llega a ser ofensivo para quienes vemos que todo los días la canasta se encarece, que la salud esta mal, que educación esta mal, que el mundo esta mal y por eso estamos mal, que las deudas se niegan a desaparecer y que los políticos, que son los mismos de siempre, nos traten de vender la pomada a fin de mes de que "¡el país esta creciendo! "
PERO ESO NO SE TRADUCE EN NADA.
Citando a Otano, Históricamente la llamada clase media chilena constituye un grupo social que se fue infiltrando entre la oligarquía tradicional y los estratos populares. En medio de estos dos asimétricos polos se desarrolló, sobre todo durante el siglo XX, un sector voluntarioso y expansivo formado principalmente por el personal necesario a un Estado en pleno crecimiento. Distintas clases de funcionarios públicos, desde el profesor primario hasta la telefonista de ministerio, se sintieron gozosamente convocados y reconocidos, lo cual les otorgó una grata sensación de pertenencia. Se empezaron a subir todos a la micro entonces: los de bajos recursos, subian el pelo comprando televisores en colores (típico de los clase media) y los de muchos recursos bajaban a patronato a comprar ropa casi con algo de culpa por estar "involuntariamente" por sobre los clase media.
Poco a poco se consideró que los profesionales eran clase media, que los que vivían en La Reina eran típica clase media, que veranear en el litoral central era propio de la clase media, que tomar un crucero con el dinero de la jubilación era una aspiración de clase media, y que la gente que uno conocía era casi toda de clase media. Pero aqui hay una mentira muy grande.
Cuando actualmente ciertos políticos nos hablan de clase media, nos invitan a imaginarnos un sector trabajador, ordenado, ahorrativo, solvente. Piensan en familias que con esfuerzo pueden llevar a sus hijos a la universidad, les es posible gozar de unas vacaciones, poseen su propio vehículo y, naturalmente, van al cine, al teatro y a otras sobrias recreaciones. Estos seres entonces, no tienen problemas en soportar con dignidad los vaivenes de la economía. Eso es FALSO. Como tantas veces se ha dicho y escrito, en Chile el hogar estadístico medio-medio percibe en torno a los 350 mil pesos al mes. Es decir, nos encontramos ante unos ingresos de sobrevivencia, teniendo en cuenta una media familiar de cuatro miembros. Y debajo todavía se encuentra un 50% de la población en peores condiciones.
A los de bajos recursos, los salva el Estado en alguna medida. Los que estan arriba, se salvan solos, obvio. Esa clase media artificialmente igualatoria mete en el mismo saco personas, familias y situaciones totalmente heterogéneas. En Chile, desgraciadamente, la media es la precariedad, la carencia, la lucha del escaso billete contra el tiempo. Y esa apreciación no creo que sea ver la mitad vacía del vaso, sino la realidad del vaso actual.
Foxley llegó a decir que se había hecho normal en Chile veranear en el Caribe. Normal, ¿para quiénes?, ¿para cuántos? ¿Era esa una demostración del bienestar del ciudadano común chileno?. Por eso molesta ahora escuchar a Velasco decir que somos casi ingratos al no reconocer que si "Uno va a bucar trabajo, lo mas probable es que encuentre". consideran que somos un barril sin fondo que amortiguamos todo: desde las alzas en los planes de Isapres, hasta el Tag
Todo porque ese desgraciado paga con 10 lucas los 5 huevos. No se de cual estará fumando, o si su Excel le distorsiona las cifras, pero el país es otro. Si es usted de clase media, si se rasca con sus propias uñas, entenderá
Saludines
Y el casero de siempre me dice . . . "le falta señorita"
. . subieron ??
"Si. .. .ahora están a $140"
x 8575755893
Compre 4 huevos nomas. Y en el camino venía meditando lo tradicional . .que todo va al alza, para la desgracia de los clase media . . . y las falacias entorno a ella.
Estamos en cercanías de elecciones. Ergo, el grueso del país, que es clase media, se convierte en la niña del baile, pues es fuente del preciado voto. Peldaño mágico que lleva a los más oscuros seres a ocupar cargos de relevancia nacional. El discurso, es el mismo de siempre. Y es verbalmente homologador (¡todos somos clase media! , La Argandoña es del pueblo ! )
Se apela a nuestro olvido y abandono, al "inestimable" aporte de los trabajadores, dueñas de casa, estudiantes, etc que son "el corazon de la patria" y bla bla. Se emplea un lenguaje del mismo tipo que se le hace a un actor, deportista, etc, que ha llegado al fin de su vida , y merece un reconocimiento a su trayectoria XD Palabrerío barato que llega a ser ofensivo para quienes vemos que todo los días la canasta se encarece, que la salud esta mal, que educación esta mal, que el mundo esta mal y por eso estamos mal, que las deudas se niegan a desaparecer y que los políticos, que son los mismos de siempre, nos traten de vender la pomada a fin de mes de que "¡el país esta creciendo! "
PERO ESO NO SE TRADUCE EN NADA.
Citando a Otano, Históricamente la llamada clase media chilena constituye un grupo social que se fue infiltrando entre la oligarquía tradicional y los estratos populares. En medio de estos dos asimétricos polos se desarrolló, sobre todo durante el siglo XX, un sector voluntarioso y expansivo formado principalmente por el personal necesario a un Estado en pleno crecimiento. Distintas clases de funcionarios públicos, desde el profesor primario hasta la telefonista de ministerio, se sintieron gozosamente convocados y reconocidos, lo cual les otorgó una grata sensación de pertenencia. Se empezaron a subir todos a la micro entonces: los de bajos recursos, subian el pelo comprando televisores en colores (típico de los clase media) y los de muchos recursos bajaban a patronato a comprar ropa casi con algo de culpa por estar "involuntariamente" por sobre los clase media.
Poco a poco se consideró que los profesionales eran clase media, que los que vivían en La Reina eran típica clase media, que veranear en el litoral central era propio de la clase media, que tomar un crucero con el dinero de la jubilación era una aspiración de clase media, y que la gente que uno conocía era casi toda de clase media. Pero aqui hay una mentira muy grande.
Cuando actualmente ciertos políticos nos hablan de clase media, nos invitan a imaginarnos un sector trabajador, ordenado, ahorrativo, solvente. Piensan en familias que con esfuerzo pueden llevar a sus hijos a la universidad, les es posible gozar de unas vacaciones, poseen su propio vehículo y, naturalmente, van al cine, al teatro y a otras sobrias recreaciones. Estos seres entonces, no tienen problemas en soportar con dignidad los vaivenes de la economía. Eso es FALSO. Como tantas veces se ha dicho y escrito, en Chile el hogar estadístico medio-medio percibe en torno a los 350 mil pesos al mes. Es decir, nos encontramos ante unos ingresos de sobrevivencia, teniendo en cuenta una media familiar de cuatro miembros. Y debajo todavía se encuentra un 50% de la población en peores condiciones.
A los de bajos recursos, los salva el Estado en alguna medida. Los que estan arriba, se salvan solos, obvio. Esa clase media artificialmente igualatoria mete en el mismo saco personas, familias y situaciones totalmente heterogéneas. En Chile, desgraciadamente, la media es la precariedad, la carencia, la lucha del escaso billete contra el tiempo. Y esa apreciación no creo que sea ver la mitad vacía del vaso, sino la realidad del vaso actual.
Foxley llegó a decir que se había hecho normal en Chile veranear en el Caribe. Normal, ¿para quiénes?, ¿para cuántos? ¿Era esa una demostración del bienestar del ciudadano común chileno?. Por eso molesta ahora escuchar a Velasco decir que somos casi ingratos al no reconocer que si "Uno va a bucar trabajo, lo mas probable es que encuentre". consideran que somos un barril sin fondo que amortiguamos todo: desde las alzas en los planes de Isapres, hasta el Tag
Todo porque ese desgraciado paga con 10 lucas los 5 huevos. No se de cual estará fumando, o si su Excel le distorsiona las cifras, pero el país es otro. Si es usted de clase media, si se rasca con sus propias uñas, entenderá
Saludines