Cinco años de cárcel. Esa es la pena que solicitó ayer la Fiscalía Oriente de Santiago en contra de Johnny Herrera, por su responsabilidad en el accidente que le costó la vida a la estudiante Macarena Casassus, la madrugada del 20 de noviembre de 2009.
Ese día, según la acusación del Ministerio Público, a la cual tuvo acceso La Tercera, el arquero de la “U” manejaba por avenida Ossa a exceso de velocidad, con las luces de su automóvil apagadas y bajo la influencia del alcohol, cuando arrolló a la joven de 22 años, quien perdió la vida de inmediato en el lugar.
Este martes, el fiscal Francisco Lanas cerró esta investigación, que se reabrió en octubre pasado, luego de que el portero fuera descubierto el 17 de septiembre de 2012, mientras festejaba Fiestas Patrias, manejando con 0,81 gramos de alcohol por litro de sangre. Esta situación quebrantó las condiciones por las cuales se había suspendido la causa en su contra, permitiendo la reapertura del caso. “Hemos cerrado la etapa investigativa y, junto con ello, presentamos la acusación en contra de Johnny Herrera. En ésta se solicita al tribunal que, de ser condenado, se aplique una pena de cinco años de cárcel, una multa de 15 UTM y que se suspenda por dos años su licencia”, dice Lanas.
Pese a que el arquero de 31 años había indemnizado a la familia de Casassus con $ 25 millones, al incumplir la condición de no volver a manejar y el agravante de hacerlo bajo la influencia del alcohol, la Fiscalía Oriente volvió a realizar diligencias en su contra, para esta vez lograr una condena.
“Esta es la máxima pena que se puede solicitar a una persona que está formalizada por conducción bajo la influencia del alcohol con resultado de muerte en los parámetros de la ley antigua, como es en este caso”, detalló el investigador.
Otro punto que agrava la situación del futbolista es que la fiscalía solicitó que al arquero no se le reconozca irreprochable conducta anterior, ya que si bien no figuran condenas en su prontuario, registra una serie de infracciones a la Ley de Tránsito, entre las que destacan haber sido sorprendido manejando a exceso de velocidad y, en otra ocasión, en sentido contrario al tránsito.
En la acusación, además, se detalla que en el juicio serán presentados 11 testigos, siete peritos y una serie de pruebas documentales para probar la culpabilidad del guardameta. “Tras la investigación, hemos reunido la evidencia para probar este ilícito cometido por el imputado”, sentenció Lanas.
De ser condenado a los cinco años que pide la fiscalía, es probable que la condena no sea efectiva y la justicia aplique beneficios como libertad vigilada o remisión condicional de la pena.
Ahora, el Cuarto Juzgado de Garantía debe fijar fecha para preparar el juicio. De todas formas, Herrera aún podría acceder a un procedimiento abreviado si está dispuesto a admitir culpabilidad y, así, arriesgar una pena menor.
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