Me dió "verguenza" el comportamiento de Pamela. De la argentina no me extraña nada, manejan un código de decoro bastante más relajado que el nuestro, no hay más que recordar las actuaciones de Dellacasa. Cada vez que puede se quita la ropa, bien por ella, es su pega.
Pero, la señorita Pamela, nos recuerda que cuando una dama se olvida de su tamaño y volumen se expone a la mofa y,la burla, no se queje después por los apelativos a la que los mismos compañeros de juego y sus enemigos le van a decir.
Ella no tiene el cuerpo de una modelo, no quiere trabajar para ello y no quiere controlar la ingesta.... Pero si, tiene ganas de mostrarnos sus excesos y deformidades, se deja abusar y sobajear por estos caballeros de manera ímpúdica y desagradable. Yo, en lo particular estoy asqueada........