Lo único que leo aquí de Büchi es el típico mantra del liberalismo de derecha sobre el mercado y su "óptimo" funcionamiento en educación.
Independiente de que efectivamente Bachelet y la oposición vean el "fin al lucro" solo como una bandera electoral sin mayor sustancia ni credibilidad, efectivamente tenemos un modelo educacional que no es ni será capaz por definición de solucionar uno de los grandes problemas que nuestra educación tiene y que -para (no) sorpresa- Büchi no menciona:
Tenemos una educación segregada y segregacionista a nivel socio-ecoomico. Solo se tiene buena educación en función del dinero que pueda pagar la familia, y todo esto amparado y subvencionado por el Estado.
Y está claro que para solucionar el problema anterior (que para muchos de estos "liberales" ni siquiera es problema), hay que desarmar de raiz nuestro modelo educacional, lo que implica:
- Eliminar el financiamiento compartido (invento de la Concertación, dicho sea de paso).
- Hacer que el Estado participe de manera más energica (en conjunto, fiscalizando y asesorando a los privados y/o los gobiernos locales) en los directorios y en las instancias administrativas de todos los planteles educacionales con aportes estatales, para no malversar los fondos públicos.
- Dejar que las familias sean el principal financista de la educación (especialmente superior), para que ese rol lo tome el Estado, via
régimen progresivo de impuestos.
- Estudiar la demanda educativa por zona territorial y por área laboral/profesional/científica para enfocar los incentivos a privados o inversiones directas estatales.