Pero mira esa sororidad papu. A esta culiá todavía le arde el culo porque el "facherío pobre e ignorante" no entendió su rutina intelectual llena de reflexiones profundas sobre el pene, la vagina, las tetas, el culo y el cómo esta culiá se quedará sola por ser una feminazi que no la aguantarán ni los gatos. En todo caso la
TV chilena sigue pegada en los 80s y 90s en sus "contenidos" y en la forma de medir sus audiencias y sería bueno que se transparente de una buena vez cómo chucha miden el rating, ya que no me extrañaría que los canales de TV hayan coimeado todos estos años a los dueños de la empresa que mide la sintonía para inflar
rostros y programas.