nicolorca dijo:
Realmente no entiendo mucho el punto de la discusión que se ha generado.
Como varios han mencionado ya, "Los protocolos..." fueron escritos en Rusia, a principios del siglo pasado, como una forma de desacreditar a los judios por parte de los zares.
Por otra parte, son una copia casi textual al texto de "Dialogo en el infierno entre Maquiavelo y Montesquie"...
Esto esta TAN probado, que invito a quienes creen en la veracidad de los protocolos, a que busquen el texto que anteriormente mencione y vean ellos mismos las similitudes.
A todo esto, me toco realizar un trabajo acerca de los protocolos para la universidad el año pasado, y uno de los puntos que toque era que me parecía improbable que nuevas generaciones pudieran creer en la autenticidad de estos...
nicolorca dijo:
Realmente no entiendo mucho el punto de la discusión que se ha generado.
Como varios han mencionado ya, "Los protocolos..." fueron escritos en Rusia, a principios del siglo pasado, como una forma de desacreditar a los judios por parte de los zares.
Por otra parte, son una copia casi textual al texto de "Dialogo en el infierno entre Maquiavelo y Montesquie"...
Esto esta TAN probado, que invito a quienes creen en la veracidad de los protocolos, a que busquen el texto que anteriormente mencione y vean ellos mismos las similitudes.
A todo esto, me toco realizar un trabajo acerca de los protocolos para la universidad el año pasado, y uno de los puntos que toque era que me parecía improbable que nuevas generaciones pudieran creer en la autenticidad de estos...
Me preste a investigar mas sobre
"Dialogos en el infierno entre Maquiavelo y Montesquie".
Sobre su autor Maurice Joly:
"Joly se ocupó de realizar ataques políticos sobre las ambiciones de Napoleón III utilizando a Maquiavelo como una sinopsis diabólica en el infierno como un extra de sí mismo para poder así emitir su opinión acerca de Napoleón.
Joly mismo parece haberse tomado en
préstamo material de una popular novela de Eugène Sue, Los misterios de las personas,
en la que los conspiradores fueron jesuitas.
Los judíos no aparecen en ninguno de los dos trabajos. Puesto que era ilegal criticar a la monarquía, Joly imprimió el folleto en Bélgica y luego trató de pasarlo de contrabando a Francia. La policía confiscó el mayor número de copias. Joly fue juzgado el 25 de abril de 1865, y condenado a 15 meses de prisión. Joly se suicidó en 1878."
Sobre Eugene Sue y su obra "Los Misterios de las Personas" o "Misterios del Pueblo":
Plagio de la labor de Sue
Siete años después de la publicación Los misterios del pueblo, un revolucionario francés llamado
Maurice Joly plagió fragmentos del trabajo de Sue en su folleto antinapoleónico, "Diálogos en el infierno entre Maquiavelo y Montesquieu", que a su vez fue posteriormente adaptada por el prusiano Hermann Goedsche en 1868 en un trabajo titulado Biarritz, en el que Goedsche sustituyó
Judíos por los "infernales conspiradores jesuitas" escritos por Sue.
Encontre en el siguiente texto:
Eric Jon Phelps, autor de Los Asesinos del Vaticano.
Martin: ¿Por qué fue Eugene Sue tan importante?
Phelps: Eugene Sue escribió su obra maestra El Judío Errante, y en esa obra maestra él entreteje una historia fantástica desde la India hasta Inglaterra hasta Francia, del poder de la Orden Jesuita y su intento de destruir a la familia Rennepont, una familia Protestante Hugonote francesa, y de su intento de adquirir una fortuna, que le corresponde por herencia a los miembros de esa familia, en un cierto día, en un cierto momento, en un cierto año. Bien, esa fortuna es mantenida, en depósito, por un Judío, por esa razón el libro es titulado El Judío Errante. En ese libro se cuenta del poder de la Orden Jesuita, y como los Jesuitas mataron despiadadamente a todos los miembros de la familia Rennepont de modo que ellos no puedan heredar su fortuna. Al único, creo, que ellos no mataron fue un sacerdote, cuyo nombre fue Gabriel, quien era un decente y justo sacerdote Católico quien repudiaba la Orden Jesuita.
Él ordenó al Judío quemar todos los títulos de valores, que totalizaban alrededor de 212 millones, que hubieran sido con justicia de esta familia francesa. Y así, los Jesuitas no la obtuvieron, ni la obtuvo la familia francesa. Está escrita con tal dramatismo y emoción que usted no puede dejar de leerla. Fue traducida en muchos idiomas diferentes. Como resultado, la nación francesa, y otras naciones, tuvieron su Revolución Francesa, la segunda Revolución Francesa de 1848. Pero a causa de que ella no fue liderada por hombres piadosos, ella benefició a los Jesuitas.
Dondequiera que usted tenga una revolución liderada por un hombre impío, es igual un hombre en un caballo, tratando de ser puesto fuera del caballo, y una vez puesto fuera, otro dictador toma su lugar. Eso es exactamente lo que sucedió en Francia, e Italia, y las naciones que estuvieron envueltas en esa segunda Revolución Francesa. Pero Eugene Sue había motivado al pueblo de Francia a expulsar a los Jesuitas, y ellos fueron finalmente expulsados en 1880 por un Masón Francés, en la tercera República, León Gambetta. Así que, eran Masones quienes los resistieron, pero ellos pagaron con sus vidas, igual que Garfield, igual que Gambetta, Roosevelt, Franklin D. Roosevelt. Roosevelt realmente no los resistió; él sólo fue matado por ellos."
Recomiendo leer esta entrevista que he encontrado en muchas paginas, y que de verdad pone en manifiesto las intenciones de los Jesuitas, sin utilizar "los protocolos de los sabios de sion" y si muchas otras observaciones historicas que acreditan esta suposicion.
Aqui el Link
El Mas Poderoso Hombre en El Mundo
dagger agrego info 172 minutos y 22 segundos despues...
Peter Hans Kolvenbach s.j. es el vigésimo noveno Superior General de la Compañía de Jesús, cuyos miembros son denominados comúnmente jesuitas. Para el cargo de Superior General se efectúan elecciones entre los miembros de la Congregación General, órgano legislativo supremo de la Compañía, conformado por delegados de todos los países del mundo. Habitualmente, dada la influencia que ha tenido la Compañía en la Iglesia Católica y el hábito negro de los jesuitas, los periodistas le llaman al General "el papa negro", pero no hay paralelismo de poderes, pues éste está subordinado al Papa. El padre Kolvenbach tiene jurisdicción sobre 22.000 jesuitas esparcidos por el mundo, que normalmente ejerce a través de los Provinciales.