Neithan Turin
Hij@'e Puta
- Registrado
- 2017/12/01
- Mensajes
- 5.918
- Sexo
Eso, he visto que hay mucho debate y negación en torno a la naturaleza agresiva de este perro y su hipotética "sed de sangre", los mas bertitos siempre indican que es la crianza la que determina la personalidad del perro, con lo que estoy de acuerdo, sin embargo, creo que no hay que olvidar que el pit bull es, al fin y al cabo, un animal, es depredador y carnívoro, y por lo tanto aunque sus instintos primarios estén parcialmente reprimidos por la domesticación, siempre cabe la posibilidad de que algo suceda que desencadene una reacción agresiva en el perro, y cuando eso pasa queda la media cagada, creo que todos hemos visto alguna vez vídeos donde un pit bull ataca a una persona y la victima tiene mucha suerte si no la matan y si sobrevive por lo general las secuelas de las heridas son muy graves, este perro desgarra y corta la carne como si nada, cuando se enoja entra en frenesí y no suelta a su víctima por nada del mundo a menos que le disparen o lo apuñalen, pareciera ser casi inmune al dolor mientras dura su fase de ataque, y si no me equivoco tiene unos dientes en la parte trasera de su mandíbula que le dan un agarre brutal.
Eso, que opinan ustedes, creen que vale la pena tener a este perro aunque sea en condición de "bien criado", pero con el riesgo latente de que algún día se te enoje y haga mierda a uno de tus hijos, o a una persona que vaya por la calle y te metas en un forro de aquellos. Por que habrá gente que se empecina tanto en negar la peligrosidad de este perro, cuando existen pruebas y registros visuales de sobra que atestigüan el peligro inmenso que implica la posesión de este can.
Eso, que opinan ustedes, creen que vale la pena tener a este perro aunque sea en condición de "bien criado", pero con el riesgo latente de que algún día se te enoje y haga mierda a uno de tus hijos, o a una persona que vaya por la calle y te metas en un forro de aquellos. Por que habrá gente que se empecina tanto en negar la peligrosidad de este perro, cuando existen pruebas y registros visuales de sobra que atestigüan el peligro inmenso que implica la posesión de este can.