Los wiccanos celtas se caracterizan por mostrar un gran respeto por la tierra y además por el interés hacia el conocimiento constante. Además se interesan por las cualidades curativas de las
plantas y las
piedras, así como su aplicación para mejorar la salud de humanos y animales; el uso de los flujos energéticos de la tierra, los
árboles y formaciones
rocosas,
lagos,
ríos, etc.
Una característica primordial de los wiccanos celtas es la devoción por la Gran Madre, La Madre y las Diosas Guerreras, lo cual brinda una situación de igualdad absoluta entre la
mujer y el
hombre.
Un wiccano celta está dispuesto a aprender y utilizar la magia de las
hierbas y plantas, de las piedras y
gemas. Debe respetar los poderes de los elementales y de los elementos al solicitar su ayuda. Además debe aprender a comunicarse con los espíritus de los antiguos. Se aprende que aquello aparentemente imposible, puede ser posible, si se le respeta adecuadamente.
La wicca celta se basa en el equilibrio de lo espiritual o supremo y lo material o físico, ya que uno se encuentra presente en el otro. Es primordial cultivar la espiritualidad propia en cada persona, que es la que ayuda a entrar en contacto con el mundo espiritual.
Para los wiccanos celtas, los
brujos o
magos deben cultivar cuatro poderes que se constituyen en normas antiquísimas de iniciación y consisten en "saber" (
noscere), "atreverse" (
audere), "querer" (
velle), "permanecer callado" (
tacere): "Saber los conocimientos para practicar los ritos mágicos, atreverse a ponerlos en práctica, querer la manifestación y permanecer callado respecto a lo que se hace". Esta última parte es muy importante ya que el silencio de sus creencias y actos evita que personas curiosas les juzguen o interfieran con sus propias vidas.
@Ultrabored en estos mismos momentos: