El poder ejecutivo es el cascarón desechable de la plutocracia. Al final del día quienes realmente cortan el queque son quienes están, con su dinero, detrás de todo este absurdo circo. "Ay que tirar unas migajas más; ay que no tirar tantas que se nos 'enfría la economía'; ay que yo administré mejor que tú el descontento popular y la miseria; ay no que a mi me fue 0,01% mejor que tú" y la weá.
Una completa mierda.
No es casualidad que sistemáticamente cada gobierno sea en esencia una nueva decepción. Nadie se salva. Ni siquiera los que salen con niveles de aprobación altos producto de la propaganda (Lagos). Son una máscara falsa de gobierno. En el fondo gobiernan con permiso y subordinación de la voluntad de los "empresarios". Supuestamente ejecutan pero en la práctica no tienen poder real o lisa y llanamente están comprados por el "lobby", palabra bonita para hacer referencia a CORRUPCIÓN y SOBORNO.
Al final Chile sigue siendo el mismo burgués gordo y amorfo sentado sobre el mismo barril de pólvora de siempre y mientras esto no cambie cada "gobierno" que llegue al "poder", lo digan o no las encuestas, será siempre una decepción.
