Confieso que a veces me dan ganas de volverme un ermitaño e irme a vivir a una montaña completamente alejado de esta sociedad de mierda cada vez más inmadura, adolescente y TONTA, estamos llenos de pendejos huevones que justifican hasta la delincuencia y la criminalidad por sus famosos dereshoumanoh, gente culiá débil de mente que quiere socialismo y comunismo a toda costa, adultos infantilizados mirando TikTok todo el puto día. Odio a mi generación de mierda, sus ídolos pop, su música basura, su intelectualismo barato y buenista, los temas que hablan, su normalización de lo retorcido y de lo dañino. No resisto más el tener que ser cínico para sobrevivir en este mundo culiao de oligofrenicos.
Tengo asumido que yo o, peor aún, alguno de mis seres queridos morirá a manos del crimen caribeño más temprano que tarde y ahí siento que me volveré loco, prácticamente un Joker, y no me importará nada salir a matar venecos, flaites, políticos y cristalitos al azar, porque todo será por culpa de ellos. Mundo culiao enfermo me tiene chato, la muerte o el apocalipsis ya me parecen un consuelo a estas alturas.