De hecho es una discusión bizantina y eterna en esos puntos la gestión de Bielsa en su último año y en las mismas peñas del Athletic tampoco hay una acuerdo total y se barajan los mismo argumentos.
Por ejemplo:
¿Fue una buena decisión dejar a Amorebieta y Llorente y enturbiar el ambiente del vestuario?
¿Se pudo hacer caja antes y traer otros refuerzos?
¿Se debió vender a Llorente en lugar de que saliera a coste cero?
Es imposible saberlo. Quizás sí, o quizás fue buena la maniobra de Josu de dar un golpe a la mesa y decir que el Athletic no es un club vendedor y quien quiera a los jugadores que page la clausula, y aquel que quiera cobrar de más (como el hermano de Llorente con los 5 kilos que exigía), pues a la "nevera".
Pasarán los años y nadie se pondrá de acuerdo en el Athletic, al igual que en otras situaciones como el retiro y el por qué de Julen Guerrero, todo lo vivido en el "bienio negro", la llegada de Irureta y Stepanovic que frenaron los progresos de Heynckes, la salida de Caparrós y Macua, el fichaje de Roberto Ríos, etc, etc; que hasta el día de hoy generan discordancia.
Con las decisiones de Josu he ido por tramos en que le apoyaba, otros que no y buena parte en el que estaba el limbo por el escepticismo, pero a mi juicio Bielsa salió en el momento preciso y cuando este equipo tenía que dar el gran salto (como con la salida de Caparrós), en este caso en cuanto a continuidad de resultados, algo de lo que se carecía desde la temporada 04-05 (precisamente la última de Txingurri). Y claro, ésto le ha dado puntos a Josu que cada vez se afianza más como presidente en cuanto a gestión.