Mrs.Anguish dijo:
Lo otro, ¿acaso uds., los pacos o cualquier persona en general no le pega un garrotazo en la cabeza a otra persona solamente porque hay una ley que te dice que no debes hacerlo?
Yo concuerdo en gran medida con el autor del tema, en que no porque algo es ley es necesariamente bueno, y si en algún momento de la humanidad podríamos vivir si represión y castigos es porque habrá autocontrol suficiente de cada persona. Pero así como vamos...
El autor del tema no critica a la ley positiva per se, critica el estado de derecho.
La ley, si es verdadera ley, es buena (o a lo sumo, neutra), si es contraria a la ley natural, es mala, no es ley, es simple coacción estatal, pura fuerza, que toma el nombre de ley.
Respecto del primer párrafo, la obligación subjetiva respecto de la ley:
Encontramos tres tipos de personas:
- Los que respetan la ley por convicción moral, pues esa ley es verdadera y es bueno respetar las "leyes" que no sean injustas. Éstos, a su vez, se pueden dividir en dos. Los que la respetan por convicción moral pura: No actuarían, haya o no ley que lo prohiba, y los que la respetan por convicción moral derivada: No se pronuncian sobre la bondad/maldad del acto, sino que se centran en respetar la ley positiva porque, no siendo contra natura, es bueno respetarla.
A este grupo llamaré "A", y sus divisiones, "A1" y "A2" respectivamente.
- Los que respetan la ley por convicción legal: "lo dice la ley, es bueno". Sergio Melnick. No les importa si la ley es justa o injusta, la respetan (ligera diferencia con A2, pero importante). Los llamaré "B". Puede basarse en el miedo al castigo o en el simple respeto a la "autoridad".
- Los que no respetan la ley: "Yo me mando sólo, soy libre y nadie me impone nada". Aquí se encuentran anarquistas, criminales, etc... Se dividen en contrarios a la ley y en indiferentes a la ley.
El autocontrol sólo está en A1, de menor modo en A2, y sólo tangencialmente en parte de B. Para lograr mayor bien posible, es necesario asegurar plenamente los A2 y los B. Para eso está la ley (A2) y el castigo en materia penal o administrativa (B, principalmente los de variante temerosa).
En general, este análisis de la persona, es más adecuado respecto de los actos realizados. El "vivo" que se queda con vuelto extra podría ser un B. Se dice "no es mi culpa que el vendedor no sepa dar vuelto". El "tonto" que devuelve la parte sobrante del vuelto es un A, y su decisión se basa en el autocontrol y en la justicia.
Pero habrá algunos que incluso, asaltan directamente la tienda, o piden vuelto demás, escondiendo monedas simulando la falta del mismo.
Por eso no basta el autocontrol y es bueno que exista la ley. Cuando todos seamos plenamente virtuosos, la ley se hará innecesaria, pero como ese momento no llegará, salvo en el Cielo, donde no hay ley positiva, entonces la ley humana es necesaria. Además, para llegar a la virtud, es necesaria una educación, pero parte de ella requiere del castigo paterno, por ello, la represión es necesaria (y no un mal necesario) y buena, pero en su justa medida. Sólo donde todos seamos adultos plenamente concienzudos y no nazcan hijos podría desaparecer la represión, pero nuevamente, incluso un escenario ideal terrenal, pensable para la eventual innecesariedad de la ley, no es pensable para una desaparición completa de la represión, puesto que el fin de los nacimientos es un mal tan grande, que condena a la desaparición a la humanidad en sólo unos pocos años.