Piñera está aterrorizado porque de negarse a todo esto le caerá una demanda por delitos de lesa humanidad, via ONU, congelando todos sus activos (en Chile y principalmente en el Extranjero).
Considerando la situación en que está, no le ha quedado otra que actuar como un eunuco inoperante (no es como si le costara mucho adoptar ese comportamiento) y aguantar la tormenta hasta el plebiscito para poder sacársela por el lado legal internacional y de paso poder desinvertirse (mover los fondos a entidades no embargables, ya que los bancos no cubren con seguro la totalidad de sus activos, a no ser que los inmovilice en algo).
Pero por otro lado, toda esta pesadilla producto de su "inacción" constituye traición a la Patria, que lo deja a un nivel peor que Balmaceda y Allende.