El Fonola imaginario, de Nicanor Parra
El Fonola imaginario
vive en un departamento imaginario
Con vigas a la vista imaginarias
a la orilla de un río imaginario
Todas las tardes imaginarias
prende su computador imaginario
se meterá al forazo imaginario
y sufrirá el bullying imaginario de aldeanitos imaginarios
al atardecer twitea sus opiniones imaginarias
que seras retwiteadas por su fans imaginarios
Luego de bloquear a fachos imaginarios
sube las escaleras imaginarias
y se asoma al balcón imaginario
a mirar el paisaje imaginario
le gritará "todos somos trans" a las nubes imaginarias
y llorará por su padre, el detenido desaparecido imaginario
Y en las noches de luna imaginaria
sueña con la mujer imaginaria
que le brindó su amor imaginario
y con lo que hará con el 10% de la AFP imaginaria
vuelve a sentir ese mismo dolor
ese mismo placer imaginario
y vuelve a palpitar
el corazón del Fonola imaginario.