Despues hartos meses volvía trabajar en la ciudad peruana de Iquique,. acá mis primeras impresiones.
Camino al hotel desde el aeropuerto, caché una larva de unos 7 u 8 años, pidiendo entre los autos, no divisé ningún mandril esperando quitarle lo recaudado.
Algunos de los antiguos empleados del hotel fueron reemplazados por alegría y colores, ahora hay una copa con
"su propina es mi sueldo "propina voluntaria" en el comedor.
Ayer salí a caminar por el borde de Cavancha, los completos con repollo crudo y papas fritas molidas encima y arepas, son la nueve delicia.
En la playa hartas carpas, unas camufladas atrás del acuario o como se llame esa weá donde estaban los lobos marinos, otras cerca de la orrilla sin que nadie diga nada, la que me llamó la atención fue una amarilla, con un tarro de pintura de esos grandotes afuera, es el baño químico veneco, ropa colagada en la parte exterior de la carpa, su buena fogata de palos y huiros, para poner la tetera. y una silla de playa para que el orangután vea la puesta de sol.
Tomé unas fotos pero no salieron bien, mi celu es callampero y estaba oscuro, creo que igual sirven para hacerse una idea.