Soy puertovariana a si que aquí la selva valdiviana está presente en todos lados, por lo que me decidí a hacer un jardín sólo de plantas nativas de la zona y en un futuro incluir incluso algunas plantas nativas de regiones cercanas a la mía.
Tengo una ideología de racionar recursos como el agua y maximizar el uso del suelo sin tener que intervenirlo (por lo que las plantas de cada zona están mejor adaptadas que cualquiera al clima donde han evolucionado) y además atraer fauna autóctona como bichitos o pájaros, y mis favoritos son los picaflores que les encantan los chilcos y los chercanes, cachuditos y rayaditos que necesitan quila, arbustos o árboles para hacer nidos o visitar el jardín para alimentarse de bichitos.
Voy a escribir mensajes largos y con el progreso del jardín, el antes, el después y lo que vendrá a si que espero que les guste y se motiven a propagar plantas chilenas autóctonas.
Primero quiero dejar esta foto de un picaflor que se le ocurrió hacer un nido en una quila cerca de mi patio y que se alimentó de mis primeros chilcos, muy pequeñitos todavía, pero también de varios chilcos en otras casa y son muy territoriales.
Espero que dentro de poco ya se atrevan a anidar en mi jardín. Por lo pronto ya vi varios chercanes buscando bichos en la hojarasca que les dejé y vienen todos los días 3 bandurrias a alimentarse en el jardín (una pareja y su cría).
Aquí se ven mis helechos favoritos, los ampe o palmillas y un arrayán que planté octubre. Se nota mucho pasto que ahora saqué por completo. Como la tierra era de tan mala calidad y era de relleno, usé tierra de hoja y compost casero para todas las plantas, y una base de hojarasca nativa y arena de lampa y le coloqué arriba musgo y hojarasca para retener la humedad y me ha servido muy bien para todas las plantas.
Esto es un pelú que estuvo a punto de morirse porque se le cayeron casi todas las hojas cuando lo planté en julio, pero con mucha dedicación logré que sobreviviera y ahora está lleno de hojas y ojalá el próximo año saque flores (que son amarillas). Estas son las primeras hojas que le estaban volviendo a salir.
Este es uno de los 8 robles chilenos que planté en el invierno al que le están saliendo las nuevas hojas (por eso el color). Además le hice un tutor con una rama de arrayán y lo uní con trozos de quila.
Aunque no lo crean tiré unas ramitas de chilco en el invierno y el primero de octubre me di cuenta que le salieron raíces (bien blancas) solas, a si que los planté y comenzaron a brotar pequeñas hojas. Esto hizo que me interesara por la propagación por esquejes y ahora soy una enviciada de esta técnica. Y estos palitos de chilco con apenas hojas diminutas terminaron en ésto:
Además me encantan los helechos, y el ampe crea mucha sombra y un microclima húmedo para otro tipo de helechos pequeñitos como estos dos.
Y ahora están saliendo muchas flores de murta que voy a subir más adelante, pero esto resume como está quedando mi jardín:
Y como regalo aquí tengo una de las tres bandurrias que me visitan todos los días (el pollo de la pareja que todavía le pide comida y no sabe sacar gusanos muy bien del suelo porque recién está aprendiendo) y que está en un lugar donde estoy eliminando el pasto para después colocar hojarasca nativa para después poder seguir plantando nativas (hace unas semanas planté los últimos dos canelos de la temporada).
Tengo mucho más para mostrar porque en mi jardín he plantado canelos, copihues, tineos, olivillos, murtas, chilcos, arrayanes, temus, tepús, chequén, un ulmo, un coihue, han salido muchos robles solos, unos 8 tipos de helecho, musgos, hepáticas, luma, fuinque, colihue, rucachucao, quillineja, chaura, jovellia, patagua valdiviana, voquila, pelú, mañíos, meli, tepa y otras especies que me puedo olvidar y aún me quedan por seguir plantando.
Ojalá los pueda motivar para que planten nativos.