Habría que también, para ser justos, analizar si lo que llamamos irracionalidad de una persona es del todo una construcción irracional o no.
A continuación compartiré lo que creo son los tres aspectos fundamentales que constituyen la mente de una persona.
El primer aspecto es el instintivo. Nacemos habiendo biologicamente heredado comportamientos que en ocasiones pueden parecernos carentes de sentido para la persona en tanto individuo, pero que desde una perspectiva que tome a la persona en tanto particularidad de una especie se puedan justificar racionalmente.
El segundo aspecto es el recordatorio. Fundado e interactuando constantemente con el aspecto instintivo, nuestro mecanismo de memoria tiende a almacenar o no experiencias clasificadas de a cuerdo a los sentimientos percibidos en el momento de ser almacenadas. Esto, en contraste con los instintos, tiende a empujarnos a comportamientos relacionados con sentimientos gratos y placenteros y a alejarnos de comportamientos relacionados con sentimientos desagradables y el sufrimiento.
El tercer aspecto es el operatorio, por medio del cual, y en síntesis con criterios almacenados en nuestros instintos y recuerdos, llevamos a cabo el proceso creativo que es la vida, creación que también es mental, si bien pudiendo modificar la forma en que clasificamos nuestros comportamientos resultando en formas que racionalmente parecen carecer de sentido desde el punto de vista de la especie, como el llegar a convertir lo placentero en sufrimiento, también podemos modificarla resultando en formas que quizá racionalmente si tengan algo de sentido desde el punto de vista de la especie como el buscar encontrar las razones que permitan comenzar a trabajar en pos de poner comportamientos ecologistas dentro de la categoría de comportamientos agradables, por dar un ejemplo.
Así entonces, los aspectos primero y segundo vendrían siendo una construcción histórica de la especie en tanto particularidad de la biosfera, lo que generalmente llamamos irracionalidad, mientras que el tercer aspecto vendría a ser el componente no mecánico de nuestra mente, el que tiene la posibilidad cierta de crear y almacenar en la memoria criterios no necesariamente heredados e incluso, por qué no si aun no se sabe a ciencia cierta en qué medida esto ocurre, modificar los aspectos primero y segundo aportando su granito de arena a lo heredable, a la construcción histórica del comportamiento de la especie.
Habiendo dicho lo que hasta acá, me queda la duda de si realmente aquello que llamamos "irracionalidad" en el ser humano carece realmente de sentido racional o si más bien son criterios racionales almacenados que nuestro aspecto operatorio no logra comprender por alguna extraña razón, que pudiera deberse, o a la obsolescencia histórica de los mismos, o a algún error o sesgo sistemático de las personas.
De hecho, ni siquiera de la religión podemos decir que es una construcción completamente irracional si partimos, por ejemplo, de la base de que ésta opera como un lubricante mental para evitar sufrimiento y daños mentales a causa del estrés.
Hay tanto de irracionalidad y racionalidad en todo lo humano, que pareciera que intentar separar las aguas carece realmente de sentido.