Contertulios, parto señalando que soy un clon. Dicho esto al fondo:
La semana pasada terminé con mi polola. Duramos un año y tres meses de pololeo formal mas cinco meses que estuvimos andando. Ella es evangélica y yo soy ateo. ambos somos profesionales y nos conocimos cuando los dos hacíamos la práctica. La cosa es que la patié por la sencilla razón de que la mina no se la jugaba. Me explico:
Ella tiene 28 años, vive con sus viejos, los que tienen una mentalidad ultra conservadora (como buenos canutos), yo tengo 29, pero por dar un ejemplo, nunca se venía a quedar a dormir a mi casa porque sus viejos eran coloriento a cagar. La cosa es que le aguanté eso y muchas otras cosas (como no tener sexo por no haber un vínculo conyugal de por medio), pero la weá llegó al límite la semana pasada cuando le dije que viajáramos a santiago a ver a mi familia y puso una cara de paja que se las encargo, y derechamente me dijo "me da flojera ir".
La pregunta es la siguiente, ¿qué chucha tienen las minas en la cabeza wn?, yo considero que soy un buen chato, un buen partido, atento, la esperé más que la chucha, obviamente nunca me arrastré, pero la semana pasada, luego de discutir con ella por no querer viajar a santiago, nos reconciliamos, fuimos a mi casa, estuvimos toda la tarde jugando al raspe (no queda otra) y se le quedó el celular po. Puta, uno es honesto pero no weón. Cuento corto le reviso el wasap y cacho que dos dias atrás ella se estaba joteando a un weón que es del coro de su iglesia. Un culiao que según me dice ella cuando se ven en persona ni se hablan. La rabia que me da es que teniendo algo bonito, serio y con futuro, ella hipoteca toda la relación sencillamente porque el otro weón es creyente y yo no.
Se que me van a webiar diciéndome que el otro ya se lo puso, pero no, porque la última vez que nos juntamos, tenía el himen intacto. ¿Qué harían ustedes sipadriwis?, ¿le darían otra oportunidad o chao no mas?
Espero sus respuestas.