CROACIALIBRE
Hincha Huevas
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Barti se fue y revela pestes del "camarín" de Borghi
Cercanos al dimitido DT formulan graves denuncias: Cracks albos fuman en el vestuario, "le ponen" en los asados y hacen lo que quieren.
Nunca fueron amigos, pero tampoco había mala onda. Entre Claudio Borghi y Marcelo Barticciotto, compañeros en el Colo Colo del 92', siempre hubo respeto. Pero al campeón de la Libertadores no le gustaba cómo el Parrillero manejaba el camarín albo y trató de terminar con los vicios que adoptó el grupo de "Las Viudas del Bichi".
Eso fue lo que provocó que se fueran rompiendo las confianzas y las malas ondas. Marcelo Pablo jamás toleró mañas que considera cornetas para un profesional. Y los dirigentes le daban la razón, porque tampoco querían que las viejas costumbres pudrieran el ambiente.
El cigarro era una de las razones. "Cuando yo estaba, había un sector donde se podía fumar", confesó Borghi. Entre los fanáticos del pucho estaban Miguel Riffo, quienes no pescaban la mala onda de Barti, pues pensaban que era un capricho del Ravotrílico, que no se vestía junto al equipo como sí siempre lo hizo Borghi.
También estaba el tema de los asados. Pero no por la carnecita, que es sana y proteica. Lo que no le gustaba a Barti, un tipo siempre atlético, era el copete. "Marcelo se dio cuenta que a algunos se les pasaba la mano a menudo", contó un miembro del ahora finao cuerpo técnico.
EL CARBÓN
Un par de copas de vino y una chelita refrescante no pueden faltar en los asados de ningún chileno. Pero Barti consideraba que era un exceso, pues una Coca light no le hacía mal a nadie.
Los hábitos alimenticios también trataba de cuidarlos. Nadie destaca por ser un guatón, pero de a poco se cachaba que varios le ponían tanto diente que se salían de la dieta. Un ejemplo en esto era el Kalule Meléndez.
La poca onda entre el jefe y el grupo pasaba por el poco don de mando. Acostumbrados al relajo de Borghi, no tenía cabida la mano dura, como cuando quiso rayar la cancha por un atraso en la hora de llegada en la pretemporada y se le amotinaron.
O como cuando los jugadores salieron disparando contra Barti por cortar a tres compipas, algo que le dolió mucho al "Cantante", como le apodaron en el camarín siguiendo la era de la talla del Bichi, pero sin cachar que se trataba de una fuerte burla al líder.
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como xuxa si los futbolistas son atletas no pueden fumar, comer asados antes de los partidos y tomar por que el rendimiento fisico se va a la mierda.
llego el barti y saco todas esas weas del plantel y a estos pasteles no les gusto y decidieron sacarlo perdiendo partidos, si el equipo bajaba a segunda no les importaba total la mision era hechar al barti.
ojala y los hechen a todos y que no quede ninguno de estos weones wenos pal copete.
Cercanos al dimitido DT formulan graves denuncias: Cracks albos fuman en el vestuario, "le ponen" en los asados y hacen lo que quieren.
Nunca fueron amigos, pero tampoco había mala onda. Entre Claudio Borghi y Marcelo Barticciotto, compañeros en el Colo Colo del 92', siempre hubo respeto. Pero al campeón de la Libertadores no le gustaba cómo el Parrillero manejaba el camarín albo y trató de terminar con los vicios que adoptó el grupo de "Las Viudas del Bichi".
Eso fue lo que provocó que se fueran rompiendo las confianzas y las malas ondas. Marcelo Pablo jamás toleró mañas que considera cornetas para un profesional. Y los dirigentes le daban la razón, porque tampoco querían que las viejas costumbres pudrieran el ambiente.
El cigarro era una de las razones. "Cuando yo estaba, había un sector donde se podía fumar", confesó Borghi. Entre los fanáticos del pucho estaban Miguel Riffo, quienes no pescaban la mala onda de Barti, pues pensaban que era un capricho del Ravotrílico, que no se vestía junto al equipo como sí siempre lo hizo Borghi.
También estaba el tema de los asados. Pero no por la carnecita, que es sana y proteica. Lo que no le gustaba a Barti, un tipo siempre atlético, era el copete. "Marcelo se dio cuenta que a algunos se les pasaba la mano a menudo", contó un miembro del ahora finao cuerpo técnico.
EL CARBÓN
Un par de copas de vino y una chelita refrescante no pueden faltar en los asados de ningún chileno. Pero Barti consideraba que era un exceso, pues una Coca light no le hacía mal a nadie.
Los hábitos alimenticios también trataba de cuidarlos. Nadie destaca por ser un guatón, pero de a poco se cachaba que varios le ponían tanto diente que se salían de la dieta. Un ejemplo en esto era el Kalule Meléndez.
La poca onda entre el jefe y el grupo pasaba por el poco don de mando. Acostumbrados al relajo de Borghi, no tenía cabida la mano dura, como cuando quiso rayar la cancha por un atraso en la hora de llegada en la pretemporada y se le amotinaron.
O como cuando los jugadores salieron disparando contra Barti por cortar a tres compipas, algo que le dolió mucho al "Cantante", como le apodaron en el camarín siguiendo la era de la talla del Bichi, pero sin cachar que se trataba de una fuerte burla al líder.
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como xuxa si los futbolistas son atletas no pueden fumar, comer asados antes de los partidos y tomar por que el rendimiento fisico se va a la mierda.
llego el barti y saco todas esas weas del plantel y a estos pasteles no les gusto y decidieron sacarlo perdiendo partidos, si el equipo bajaba a segunda no les importaba total la mision era hechar al barti.
ojala y los hechen a todos y que no quede ninguno de estos weones wenos pal copete.
barti