Ya digerida la derrota, es momento de pensar en Colombia...
El ambiente previo a Brasil era muy triunfalista, no me gustaba tanto ambiente de éxito cuando aún la selección no ha mostrado regularidad; ahora es muy diferente, hay temor, nerviosismo y preocupación ya que estamos obligados a ganar si pretendemos llegar al mundial. Creo que las condiciones anímicas son las que de verdad necesitamos para sacar un buen resultado, nuestros jugadores entrarán a la cancha con el máximo de concentración para demostrarles a todos los chilenos que se la pueden.
Este partido es la medición perfecta de nuestras capacidades, puede marcar un punto de inflexion en nuestro camino mundialista, un triunfo convincente significará buenas posibilidades de clasificación, un empate o una derrota pueden ser lapidarias.
Sobre las formaciones ya aburre hablar, cada chileno tiene una idea distinta sobre como pretenden que juguemos, yo personalmente prefiero un 3-5-2, un 3-6-1 o el clásico 4-4-2, pero eso da lo mismo, Bielsa morirá fiel a su 3-4-3, entonces la pregunta es ¿como logramos el equilibrio?, está claro cuando vemos los partidos que todo parece muy desordenado, cuando atacan suben todos y no quedamos sin hombres para contener un contragolpe, o cuando defienden se retrasan todos tras la mitad de la cancha y no podemos contragolpear, a veces se sobreprotege una zona de la cancha dejando vía libre por el otro costado y eso agregado a la ineptitud defensiva que tenemos genera que nos vengan a golear a domicilio 2 veces seguidas.
Si hacer una selección es tan fácil como hacer una formación de 11 jugadores, todos podríamos ser DT, pero lamentablemente el fútbol es muy complejo en su desarrollo y preparación, a pesar de ser simple en su concepto. Un DT nacional no tiene tanto tiempo para preparar a sus jugadores como uno de club, por eso siempre se recomienda una formación basada en explotar al máximo el potencial de los jugadores y tratar de hacerlos coincidir en su mejor puesto; Bielsa no ha hecho eso, ha intentado cambiar radicalmente el estilo futbolístico de Chile y para eso ha tenido que improvisar mucho, a veces logrando resultados, a veces no.
Lamentablemente la paciencia se acaba y se empieza a exigir regularidad, yo todavía creo en la capacidad del entrenador, pienso que se ha equivocado en algunas cosas, pero todo es solucionable, hay que trabajar más duro en los entrenamientos, preparar mejor las jugadas de ataque y resolver el desbalance en el mediocampo; para mañana será imposible resolverlo todo, pero siempre hay margen para ajustar mejor las piezas.
Me gustaría un triunfo 2-0, no lo veo imposible, sólo espero que el equipo responda al nivel que esperamos.
, tambien yo agregaria...callao el loro....
o no?
Alberto plaza