Más importante que el asunto dinero, lo principal es examinar la relación de la persona con la lectura manteniendo al margen los contextos físicos y culturales determinantes que son las caras de lo circunstancial y cambiante (por lo tanto ilusorio):
¿Realmente la persona leería si no tuviera que sacar buena nota en dicha prueba, en dicha evaluación, para tener dicho título?
¿Leería si no supiera que muchas lecturas le dan el estatus de culto, educado, sabio, y eso es bueno y deseable para quien sea?
¿Habrían personas leyendo si no tuviesen oportunidad de comunicar su experiencia con la lectura a los demás?
Yo respondo que sí a las tres preguntas, pero eso me lleva a hacerme la pregunta: ¿qué es lo que queda entonces, y que es el verdadero móvil de la lectura?