Ikari
Hij@'e Puta
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Ante todo me saco el sombrero ante la expertise jurídica que han demostrado los sentenciadores de El Antro. No cabe duda de que si cualquiera de estos hombres estuviera sobre un estrado decidiendo quién es culpable e inocente, Chile sería un país mejor y hasta más civilizado.
He aquí un mínimo atisbo de esperanza.
Primero, debe saberse que los delitos sexuales, por su naturaleza, son de los más difíciles de pesquisar. Historias en donde se encuentra ADN en la vagina, se lleva dicho material genético a un laboratorio y aparece la cara del culpable en un monitor, sólo ocurren en CSI.
Por lo demás, tocas un punto interesante al mencionar la palabra "semen". Y éste es un detalle no menor que toda la jungla que ha posteado parece haber omitido, además de los propios estudiantes de derecho o abogados que han comentado, incluso.
La cuestión es que, al menos a partir de los escuetos antecedentes que publica este medio llamado "El Tipógrafo" (???), en ningún momento se habla de violación. Digo, ¿alguien estuvo presente en los hechos y podría constatar que efectivamente uno de los supuestos agresores se bajó los pantalones y accedió carnalmente a la víctima? Se habla de introducción de piedras en la vagina, pero eso en ningún caso constituye violación.
Puede parecer chocante en un principio, pero con la calificación jurídica de los hechos no se juega, menos cuando son los diarios los que -con esa facilidad propia de los periodistas para desvirtuar los hechos- hacen y rehacen historias y más encima las califican jurídicamente como si fueran jueces o como si, al menos, tuvieran un mínimo conocimiento de la materia (lo que claramente no ocurre en este caso).
Eso de "llenar mal la ficha de detención" suena a cliché, frase popular o lugar común (tipo "la puerta giratoria"). Ni siquiera sabemos cuáles fueron las circunstancias particulares por las cuales se rechazó la solicitud de prisión preventiva. Puede que el fiscal se haya ahueonado y no haya logrado convencer al juez o no haya presentado suficientes antecedentes.
Cualquiera fuera el caso, el juez no puede privar de libertad a una persona en esas circunstancias (lo que en ningún caso, de nuevo, significa que "queden libres"). Pensar lo contrario es no entender cómo funciona el proceso penal en cualquier sistema moderno y civilizado, y no te deja mejor parado que la manga de acéfalos que vociferan "tortura china", "pena de muerte", "córtenle la tula", "Chile, país de mierda", "jueces culiaos", "sólo en Chile", "el imputado no debería tener derecho a defensa" y "la reforma vale callampa".
He aquí un mínimo atisbo de esperanza.
Primero, debe saberse que los delitos sexuales, por su naturaleza, son de los más difíciles de pesquisar. Historias en donde se encuentra ADN en la vagina, se lleva dicho material genético a un laboratorio y aparece la cara del culpable en un monitor, sólo ocurren en CSI.
Por lo demás, tocas un punto interesante al mencionar la palabra "semen". Y éste es un detalle no menor que toda la jungla que ha posteado parece haber omitido, además de los propios estudiantes de derecho o abogados que han comentado, incluso.
La cuestión es que, al menos a partir de los escuetos antecedentes que publica este medio llamado "El Tipógrafo" (???), en ningún momento se habla de violación. Digo, ¿alguien estuvo presente en los hechos y podría constatar que efectivamente uno de los supuestos agresores se bajó los pantalones y accedió carnalmente a la víctima? Se habla de introducción de piedras en la vagina, pero eso en ningún caso constituye violación.
Puede parecer chocante en un principio, pero con la calificación jurídica de los hechos no se juega, menos cuando son los diarios los que -con esa facilidad propia de los periodistas para desvirtuar los hechos- hacen y rehacen historias y más encima las califican jurídicamente como si fueran jueces o como si, al menos, tuvieran un mínimo conocimiento de la materia (lo que claramente no ocurre en este caso).
Eso de "llenar mal la ficha de detención" suena a cliché, frase popular o lugar común (tipo "la puerta giratoria"). Ni siquiera sabemos cuáles fueron las circunstancias particulares por las cuales se rechazó la solicitud de prisión preventiva. Puede que el fiscal se haya ahueonado y no haya logrado convencer al juez o no haya presentado suficientes antecedentes.
Cualquiera fuera el caso, el juez no puede privar de libertad a una persona en esas circunstancias (lo que en ningún caso, de nuevo, significa que "queden libres"). Pensar lo contrario es no entender cómo funciona el proceso penal en cualquier sistema moderno y civilizado, y no te deja mejor parado que la manga de acéfalos que vociferan "tortura china", "pena de muerte", "córtenle la tula", "Chile, país de mierda", "jueces culiaos", "sólo en Chile", "el imputado no debería tener derecho a defensa" y "la reforma vale callampa".
Sigo diciendo que ese mandril de fiscal es un INEPTO, pues se trata de delitos de connotación pública.
