Estamos a un paso de volver a un estado de insociabilidad hobbesiano de la guerra total del todos contra todos. Lo natural es el orden publico, bien sagrado de todo estado, valor común para todo pacto social: desde hobbes, rousseau, montesquieu hasta kelsen. No se ha tocado el estilo de vida ni se han alterado la conducta de consumo de los chilenos, éstos aun gozan de los frutos obtenidos del bienestar causado por años de desarrollo de infraestructura eléctrica y de aguas, y de tratados de libre comercio suscritos por el Estado. Sospechosamente no han habido atentados contra lineas de suministro, contra la red electrifica, ni contra el servicio de aguas, una vez que los chilenos se harten del caos o sufran esa clase de atentados, sumado a la destrucción de símbolos de la identidad cotidiana de la ciudad en la que viven, la gente querrá la paz social la preferirá a cualquier cambio social, y pedirá: a un caudillo o grupo organizado capaz de ser garante de la paz social.
Después de esta pasada espero que Chile vuelva a ser el país gris, aislacionista, quitado de bulla, de pueblo mestizo, tranquilo, sacrificado y trabajador que siempre ha sido.
Viejos culiaos calientes a lo Maestro Roshi
bertos que se creen el che solo por redes sociales.
El mundo es un pañuelo
...y es homofóbico
